El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó en una entrevista con Newsmax que submarinos nucleares norteamericanos han sido desplazados «más cerca de Rusia» como respuesta directa a los recientes dichos del exmandatario ruso Dimitri Medvedev, quien calificó sus advertencias como pasos hacia una guerra. Trump afirmó que estas unidades están posicionadas estratégicamente en “regiones correspondientes” y advirtió que se trata de una amenaza definitiva, dado el potencial destructivo de estos sistemas de armamento.

El mandatario también estableció un ultimátum al presidente ruso Vladimir Putin: si no se logra un alto al fuego antes del 8 de agosto, EE.UU. aplicará nuevas sanciones económicas. Aunque reconoció que Putin “sabe cómo evitarlas”, insistió en que la presión continuará. Trump lamentó que, pese a conversaciones “positivas” con el líder ruso, Rusia ha continuado con ofensivas como el reciente bombardeo masivo sobre Kiev, que dejó al menos 31 muertos y más de 150 heridos, cuestionando la sinceridad de Moscú en las negociaciones de paz.

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