La búsqueda de los siete pescadores desaparecidos de la lancha «Bruma» continúa intensamente con un importante despliegue de recursos por parte de la Armada, el Gobierno y los propios pescadores. La madrugada del domingo, la embarcación naufragó frente a las costas de Coronel, en la Región del Biobío. El delegado presidencial regional del Maule, Humberto Aqueveque, informó que nuevos recursos se han sumado a las labores, incluyendo un ROV submarino y una lancha hidrográfica. Estos equipos especializados permitirán realizar una exploración más profunda, con el ROV alcanzando hasta 300 metros de profundidad y la lancha hidrográfica utilizando sonar para detectar restos a profundidades de hasta 260 metros.

Aqueveque destacó que el trabajo en conjunto con pescadores y buzos está siendo clave para obtener indicios que ayuden a esclarecer lo sucedido. Aunque inicialmente se trataba de un accidente, las investigaciones avanzan hacia la hipótesis de una posible colisión. Además, el delegado explicó que la información obtenida del ROV será fundamental para evaluar la viabilidad de una operación de buceo de profundidad, dependiendo de los objetos que se encuentren. Las buenas condiciones meteorológicas han permitido que la búsqueda continúe con esperanza de nuevos hallazgos que puedan esclarecer los hechos y aportar a la investigación que lleva adelante la Fiscalía.