- Patrullajes preventivos por distintos sectores de la comuna son parte de las medidas que se han dispuesto para proteger la integridad física de los curicanos y sancionar a quienes infrinjan la normativa.
Bajo el nombre “Volantín Seguro” la Municipalidad de Curicó en conjunto con Carabineros están realizando una campaña preventiva para evitar el uso del hilo curado al momento de elevar volantines en estas Fiestas Patrias. No solo porque la Ley 20.700 prohíbe su uso, sino porque puede provocar serias heridas a las personas o incluso la muerte.
Al respecto, el director de Seguridad Pública, Juan Carlos Ponce, comentó que este llamado que está haciendo el municipio busca “resguardar la integridad física y la vida de los niños y niñas de nuestra comuna y, que los papás puedan comprender también los alcances del uso de esta fibra cubierta de cristal o vidrio, cuya producción ilegal debe ser denunciada en el marco de la Ley.”
Ponce agregó que junto a Carabineros están realizado fiscalizaciones en diversos sectores de la comuna con el objeto de velar por el cumplimiento de esta normativa. En Santa Fe uno de los procedimientos finalizó con la detención de dos personas, una por hacer uso de este elemento, y otra por porte ilegal de arma.
En relación a esta iniciativa, el subcomisario de Carabineros de la Subcomisaría de Santa Fe, capitán Eduardo Oyarce, dijo que para la institución policial es de suma importancia que no usen hilo curado para que no se vean involucrados en un delito.
“Tenemos que recordar que el uso del hilo curado en nuestra legislación actualmente es un delito, como institución y obviamente en conjunto con la municipalidad estamos promoviendo el uso responsable del hilo que no tenga las características del vidriado, no tan sólo porque es un delito sino que puede afectar a las personas que lo usan como a aquellos peatones, motociclistas o ciclistas que pueden estar transitando por la vía pública y puedan ser heridos por este elemento que al final es cortante”, mencionó.
Cabe recordar que, Ley 20.700, que fue promulgada el 17 de septiembre de 2013, sanciona como delito la venta del hilo curado con penas de presidio menor en su grado mínimo, de 61 a 540 días, y multas de 100 a 500 UTM, mientras que su uso con multas de 2 a 50 UTM.