En entrevista con Zona Deportes, la destacada deportista, periodista y profesora de educación física de Curicó, Alejandra Ramos, repasó parte de su historia personal, que la llevó a lo más alto de la élite del atletismo mundial.
Nacida en sectores rurales de Curicó y dueña de tres vigentes récords nacionales en 800, 1.500 y 3000 metros planos, sostuvo que su relación con el campo le dio esa conexión con lo natural que refleja lo que es, una persona sencilla, activa, deportista, aunque siempre metódica y con aspiraciones propias además de profesionales.
Es así como tras tener sus inicio en el basquetbol, Ramos es reclutada por el entrenador Zenén Valenzuela para llevar una vida dedicada al atletismo. “Mi hermana Carla se dedicó a esto primeramente, luego yo. Llegó el momento cuando tuve que decidir si quería dedicarme a esto o no”, sostiene.
Pero ¿Cuándo se enamoró de las pistas? “Cuando fui seleccionada juvenil en relevos 4 x 100 y 4x 400”, aclara y reconoce: “soy una agradecida de la vida, de mis padres, siento que todo lo he hecho con dedicación y pasión”.
Su vida en España
Luego de destacar en Chile y en plena preparación a los Juegos Panamericanos (Puerto Rico 1979), comenzó a pavimentar esta larga expedición de 14 años por Madrid, todo en base a su perfeccionamiento en el deporte. “Hubo un convenio entre chile y España, enviaron a los mediofondistas a Madrid, era la única mujer de la delegación. Luego de los Juegos, decidí irme a Madrid, así que llamé al entrenador José Manuel Ballesteros, convalidé los estudios y me fui. Me di cuenta que la calidad del deporte es otra”, afirma.
Posteriormente vendrían los Juego Olímpicos de Los Ángeles 1984, donde Ramos llegaría a semifinales, a pesar de que podría haber sido mejor. “Tuve un accidente con una moto Vespa. A pesar de todo me recuperé y pude competir”.
Con el pasar de los años llegaría el retiro (Torneo Orlando Guaita 1993), sin embargo, su legado ha sido imborrable hasta hoy, agradeciendo todo el camino recorrido. “El deporte me enseñó a ser mejor persona, a ser profesional, si tuviese que repetir nuevamente lo que hice, lo volvería a hacer”.
Ahora, en su cargo de Seremi del Deporte de la Región del Maule, sigue buscando cosas que continúen con su motivación, más allá de lo deportivo. “Me gusta la fotografía, además he estado haciendo cursos de Decoración de Interiores. Además tengo una responsabilidad familiar de futura agricultora. La verdad es que estoy contenta. Ha sido un lindo recorrido”, dice.